Una vez más y obligada por las circunstancias de dar respaldo a Máximo y a Alicia, llega la presidenta para realizar un acto y anuncios en materia de salud y obra pública, a la ciudad capital. Río Gallegos sigue siendo un caos. Aparecieron 15 millones de pesos para calmar a los trabajadores municipales, pero no alcanzó. ¿Quién los puso?, nadie lo sabe. La Gendarmería intimó a los municipales que cortaban ruta nacional.
La presidenta llega mañana jueves 23 de julio a Río Gallegos a realizar anuncios de salud y obras, pero en realidad se trata de un acto político, donde Cristina Fernández respaldará la candidatura a diputado nacional de Máximo y el lanzamiento de Alicia Kirchner como candidata a Gobernadora. El acto será realizado en el gimnasio Lucho Fernández, donde se ha iniciado un trabajo de limpieza, acondicionamiento y seguridad, para respaldar el acto político del FPV.
En tanto, la ciudad no cambió nada. Con más de 120 días de paro municipal, la capital luce sucia, con cloacas rebalsadas, basura por todos lados y un descontento público generalizado. Para mitigar este impacto y dar a entender que la llegada de Cristina trae soluciones, algunos militantes comenzaron a prestar el servicio de recolección de residuos, pero en realidad no se hace en toda la ciudad, sino en el sector donde pasará la comitiva de la presidenta. A los pozos y el caos de tránsito, deben agregarse los semáforos que no funcionan, para lo cual, como única y veloz solución, los diputados kirchneristas decidieron donar “luces led” para los aparatos de señalización.
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